domingo, 28 de septiembre de 2014

Orígenes Del Culto Al Señor De La Muerte


El Culto del Señor de la Muerte consiste de cientos de miles de seguidores regados a través de Argentina y países vecinos. Sus devotos alaban y adoran al Portador de la Guadaña, cuya magia es utilizada de manera ritualistica para obtener dinero y riquezas, atraer amor, abrir los caminos a la felicidad, proteger en contra de todo peligro, sanar y desterrar enfermedades, colocar maldiciones y dominar o aniquilar a los enemigos.



Dentro de este culto al Santo está representado por la imagen de un esqueleto, a menudo vestido de negro, que sostiene una hoz en una de sus manos .El origen de esta representación parece haberse originado en 1767. Fue en este año que el Rey Carlos III de España dio la orden de la expulsión y persecución de los Jesuitas que estaban establecidos en Cuenca del Plata. La decisión política se hizo debido a que los Jesuitas en Paraguay y Argentina habían obtenido demasiado poder, riqueza e influencia como para preocupar a la Iglesia Católica, los cales convencieron al monarca Español para que actuara en contra de los jesuitas y los removiera de la colonia para confiscarles todas sus riquezas.

Estos Jesuitas habían recibido ayuda de las tribus locales de los Indios Guaraní y con ello habían construido enormes templos e iglesias. Como se negaban a dejar a España el Rey Carlos tuvo que declarar la guerra en contra de los Jesuitas y sus seguidores. Con un poder militar enorme y siendo guiados por El General Carlos Francisco de Croix, la fuerzas militares Españolas aniquilaron a la mayoría de Jesuitas.

Confiscaron de esta manera sus riquezas y quemaron la mayoría de Iglesias y templos importantes. Uno de estos templos guardaba un icono especial que estaba tallado con madera del árbol de Palo Santo. Era una figura de tamaño real de Jesús, Satán y la Muerte como un esqueleto recogedor de almas.

Los indios Guaraní habían tallado este icono para los Jesuitas y a su vez lograron rescatar a la imagen del incendio del templo. La llevaron a la selva y allí dividieron a la figura en tres piezas separadas. Cada tribu recibió una de estas partes, la primera tuvo a la imagen de Jesús, la segunda recibió a la imagen del Diablo y la tercera a la imagen de la Muerte con la forma de esqueleto portando una guadaña.

Así fue como los tres cultos del Señor Jesús, de San Diablo y del Señor de la Muerte evolucionaron en las tribus de los Guaraní. Estos cultos eran más paganos que cristianos ya que sus conexiones genuinas eran las de su propia magia religión Shamanistica y no tanto como la religión por la que los jesuitas lucharon.

De acuerdo a la tradición popular, el linaje del culto moderno al Señor de la Muerte se relaciona directamente con la tribu guaraní que decidió quedarse con la figura del esqueleto con la hoz. Ellos habían asegurando que poseía el poder de proteger en contra de la "mala muerte" así como castigar a todos sus enemigos.

Adicionalmente se observan elementos de la brujería y de la religiones afro-brasileñas en algunas de la manifestaciones del culto al Señor de la Muerte. Debido a la influencia de estas tradiciones africanas algunos seguidores del Señor de la Muerte lo comparan o identifican como el Amo de la Muerte. Un Exu. Los Exus con los que San La Muerte ha sido identificado son los de los cementerios y las líneas Kalunga y Caveira tales como Exu Lorde da Morte, Exu Morte, Exu Caveira, Exu Tata Caveira, y el dueños de las almas Exu Rei das Almas Omulu.

En algunas partes de Argentina este sincretismo se ha venido desarrollando de manera natural gracias a las similitudes que existen dentro de estos cultos. Por ejemplo, el Lunes es el día tanto de Exu como de San La Muerte, ambos usan colores rojo-negro o negro-blanco en sus elementos como velas y talismanes. También comparten ofrendas como tabaco, carnes rojas, licor, cerveza, aceite de palma (aceite de dende) y comida picante.

Al igual que Exu, San La Muerte abre los caminos y posee las llevas a todas las puertas que estén cerradas, entrega la bendición de la vida y la maldición de la muerte. Así mismo Exu utiliza su tridente para remover los obstáculos del camino.

San La Muerte utiliza su guadaña para cortar y eliminar bloqueos. Tanto Exu como San La Muerte realizan todo tipo de trabajos que van desde la sanación hasta la muerte.

Este sincretismo es interesante pero si lo consideramos desde la perspectiva iniciatoria de la religión Kimbanda y a su opinión acerca de la realidad del Exu, entonces tal sincretismo no es válido. Lo mismo aplica a la perspectiva esotérica del culto San La Muerte, la cual deja muy en claro que el sincretismo entre Exu y San La Muerte solo se queda en los atributos exteriores.