Saludo a la Poderosa Muerte y
a su Soberano,
Como sello es mi pie izquierdo tres veces antes de la puerta.
Saludo al Señor De Los Huesos
y pido su protección,
En Él he puesto toda mi
confianza y toda mi fe.
Camino hacia la Gran Cruz Negra,
Que marca el lugar de la lomita secreta.
Enciendo siete velas ante sí,
Y toco el suelo con la varita de endrino.
Por el primer cráneo sembrado en la tierra,
Tres veces golpeo el suelo con la mano izquierda.
Por los dos huesos cruzados debajo de ella,
Con mi varita trazo su sello sobre la arena.
Riego el signo trazado con ofrendas de libación,
El agua blanca, negra y roja esparciré en el suelo.
Perfumo la cruz con el aliento de Amiahzatan,
E invoco al buscador del Primer Montículo De La Tumba.
He llegado para convocar al Señor
De Las Sombras,
Al Maestro de los que moran adentro de los huesos ahuecados.
He llegado a plantar las Llamas Cthónicas,
El Triple Fuego de los Infiernos.
Hago un llamado a mi Maestro Caín,
El sembrador del primer cadáver.
Hago un llamamiento al Señor De Todas
Las Tumbas,
El Labrador Zurdo, El Rey De Los Huesos.
Maestro enérgico escucha mi llamado,
Y concédeme Tu Fuerza Infernal.
Guía mis pasos hacia tu Reino,
E ilumíname con tus Arcos de Luz de Muerte.